Más política

En la entrada anterior hablé de mi encuentro con Reagan. Si hay un político que cláramente ha recogido su testigo y al que admiro ferviéntemente por su trabajo en películas como Conan (bárbaro y destructor) o Hércules en Nueva York es al viejo Arnie.

Arnie por un error de la naturaleza no es americano, sino austriaco. Un buen día de su adolescencia decidió ponerse cachas. Según palabras de Arnie en una entrevista jurásica al País semanal: "mis padres estaban preocupados porque a los 15 años en vez de fotos de tías en pelotas, tenía un póster de un tío haciendo flexiones"( me encanta). Años y títulos de Mr. olimpia después Arnie empezó a dar mamporros en el cine para mi deleite y así poquito a poquito llegó a gobernador, no sin antes pasarse por la piedra a la que sería mujer de Stallone, Brigitte Nielsen lo que no fue óbice para que ambos colosos se hicieran coleguitas.

Me encantaría escuchar lo que se dicen:

-Buenos músculos Arnie
-Buenos músculos Silver.

En fin

La siguiente foto es de cuando las malas lenguas intentaron atacarle diciendo que había acosado a no sé qué mujer, cuando todo el mundo sabe que Arnie sólo tiene que chasquear los dedos para que miles de patinadoras en bikini de California aparezcan dispuestas a complacerle hasta los límites que su mujer imponga, pues no olvidemos que Arnie es un buen hombre y es que miles de comunistas, marcianos, negros... son ya muescas en la culata de su revólver.



El caso es que tuve que personarme allí para que uniendo nuestros carismas Arnie saliera elegido y no dejar el cargo de gobernador en manos de una estrella del porno.

América estaba a salvo de nuevo.

Back to the glory of Germany

Me he puesto una bonito foto nueva en el perfil de cuando fuí a hablar con el presidente de EE.UU (Reagan, por supuesto. No acepto ninguno más).

Sólo de recordarlo se me saltan las lágrimas y es que es bonito que un actor llegue a presidente. De hecho Alfredo Landa está intentando ser Canciller en Alemanía, o al menos gobernador de Bratwurst para controlar el tráfico de salchichas. Como grandes amigos que somos me ha mandado un par de sus carteles electorales que ya cuelgan por toda la cuenca del Rhin:

En el primero nos advierte (nótese que pone Atchung) con su pijama rojo de gala de que ni se nos ocurra boicotear su candidatura, mientras que en el segundo nos muestra una estampa hogareña de cara a cautivar al hombre alemán medio.

Más videoclips

Youtube es una auténtica mina para este tipo de cosas:

Vortex-Open the gates

Metaleros y soldados holandeses del Siglo XVI tienen una bronca por ver si abren una puerta o no en la que suponemos que el cantante pierde la peluca, porque al final del video ya no la lleva. Obra de culto.



Helix-rock you

Viajamos un poco en el tiempo a una especie de era hyboria, concrétamente a una especie de revolución de esclavos y esclavas en toples que quieren rocanrolear(Sí al cantante le falta un piño).



Krokus-eat the rich

Con uno de los títulos más repetidos de la historia, la originalidad la encontramos en los instrumentos/armas, en la elegancia del ballet y en que esta gente antes de dedicarse al heavy se concentraban en tocar en garitos de la costa del sol a finales de los 70.

Para acabar, lamentáblemente no está disponible la opción de incluir diréctamente en la publicación el videoclip, pero os animo a pinchar en el link para disfrutar de una oda de Ossian a la cerveza. Birra, la gasolina del metal:

http://www.youtube.com/watch?v=cWbimcpy4jA

Lección de biología

Muchas veces la naturaleza nos regala la vista con ejemplares que se distinguen de los demás por tener algún rasgo diferencial que le hace destacar por encima de la media. Podríamos estar hablando del gorila Copito de nieve (que juro y perjuro que tenía un primo humano al que conocí), de algún loro de colorines o bien del perro heavy metal:

No sería justo negar que en su creación ha intervenido la mano del hombre, sin embargo eso no le resta ni belleza ni elegancia al can. Me gustaría decir que su hábitat se encuentra en los bajos de Argüelles, pero es difícil de avistar entre la mayoría de sus parientes antropomorfos entre los que me cuento.